La llegada del otoño convierte a la Comunidad de Madrid en un escenario privilegiado para los amantes de la micología. Pero, junto con la belleza y riqueza de los bosques, aparecen también los riesgos: no todas las setas son comestibles y diferenciarlas es esencial para evitar intoxicaciones. Por eso, esta semana Madrid Mejora Tu Vida se adentra en el Parque Natural de la Sierra de Guadarrama de la mano del micólogo de Rutas Micológicas, Chema de Vicente, para aprender a reconocerlas y conocer sus propiedades.
De Vicente explica desde el terreno que “el hábitat en el que nos encontramos tiene todos los parámetros que necesita una seta para crecer”: humedad, sombra y la presencia de árboles de diferentes especies que favorecen la aparición de hongos. Un entorno perfecto para la proliferación de variedades tanto comestibles como tóxicas.
Para proteger este ecosistema y evitar la masificación, en la zona se ha puesto en marcha un “plan de aprovechamiento micológico”, un sistema que regula la entrada al coto mediante permisos. El objetivo es doble: conservar el entorno y garantizar una recolección sostenible y segura.
Durante la jornada, Chema insiste en la importancia de distinguir correctamente las setas comestibles de las que no lo son, ya que una confusión puede tener consecuencias graves. Explica qué rasgos debemos observar, por qué no basta con intuiciones o parecidos visuales y cuáles son los síntomas más habituales de una intoxicación, que pueden ir desde molestias digestivas hasta cuadros más severos que requieren atención médica inmediata.