Descubrimos a un auténtico fanático de la decoración navideña. George vive en la calle La Palma y no hay rincón de su casa que no esté decorado.
Lo más curioso es que hablamos de más de 20 abetos distribuidos en su casa. Un auténtico paraíso para los fans de la Navidad.
Diferentes rincones dentro de un enorme bosque artificial que ha montado de cero este excéntrico entusiasta navideño solo por puro placer.
Pingüinos, Papá Noeles, cascabeles y muchas, pero muchas luces… podría tratarse perfectamente de un plató de cine en miniatura.
El sentimiento de la Navidad está más fuerte que nunca en Madrid y por gente como George que lo hace posible.