Olvídate de la doncella en apuros que espera ser rescatada. Un zapato está a punto de cambiar su historia para siempre. Cenicienta, el musical llega al Teatro Coliseum de la Gran Vía a partir del 3 de octubre, renovada, moderna y tomando firmemente las riendas de su propio destino.
Se trata de una versión contemporánea del clásico de Rodgers & Hammerstein que promete no solo hacer soñar, sino también inspirar, bajo una espectacular producción de Stage Entertainment, la compañía detrás de fenómenos como los musicales de 'El Rey León' y 'Aladdín'.
Este montaje despliega un imponente dispositivo artístico con 34 actores y 20 músicos en directo para dar vida a una fábula actualizada. "Es la oportunidad de revisitar un clásico que todos conocemos, pero hecho a día de hoy, con un cambio en su historia y en algunos de los personajes", explica Alejandro de los Santos, director residente y adaptador del musical. Un diseño inspirado en "la época dorada de Hollywood" completa la experiencia.
El cambio más significativo reside en el corazón del personaje principal. La Cenicienta ya no es una figura pasiva; es una mujer inteligente y decidida con aspiraciones que van más allá de un baile en palacio.
"Es ella realmente quien rescata al príncipe", revela Briel González, quien da vida al Príncipe Tupher. "Él es un poquito torpe, aún no sabe muy bien gobernar, y es gracias a la sabiduría, a la bondad y a la generosidad de la Cenicienta que le va a mostrar todas las cosas malas que están ocurriendo en el reino y a ser un buen líder".
Paula Mallagarai, la actriz que encarna a esta Cenicienta del siglo XXI, lo corrobora: "Es una mujer muy inteligente, muy decidida que guiará al príncipe en su camino". Una heroína, en definitiva, que además de soñar con el baile, sueña con cambiar el mundo.
Los protagonistas, ambos con una sólida trayectoria en musicales, destacan la potencia visual y auditiva del espectáculo. Paula Mallagarai alaba "una escenografía muy viva con unas proyecciones y unas pantallas espectaculares", mientras que Briel González añade el impacto del vestuario: "Es empezar el vals y te hipnotizan en la butaca".
Completa esta inmersión una banda sonora en vivo que promete ser uno de los grandes pilares del montaje. "Es un honor poder tener a 20 personas talentosísimas dándonos la mano cada noche y disfrutando de este sonido tan espectacular que tenemos aquí en el Teatro Coliseum", concluye Mallagarai.
'Cenicienta, el Musical' se presenta así como una reinvención necesaria y suntuosa, lista para conquistar al público madrileño con un mensaje de empoderamiento y una producción a la altura de los grandes éxitos internacionales.