La consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute, ha calificado de “repugnantes” las declaraciones de Francisco Martín, delegado del Gobierno en Madrid, quienes acusan al consistorio de Pozuelo de Alcorcón de “racismo preventivo”.
Esto se produce tras el cierre del Centro de Recepción, Atención y Derivación del municipio, argumentando que no cuentan con las licencias necesarias para refugiados.
Matute lamenta el uso de "terminología para enfrentar y desasosegar a la población", y ha rechazado "categóricamente" cualquier acusación de racismo al Gobierno autonómico.
Además, según ha explicado, el centro de Pozuelo, al igual que los de Carabanchel y Alcalá de Henares, fue concebido como un recurso de acogida temporal ante una oleada migratoria, pero su uso se ha consolidado de forma permanente.
Así las cosas, la consejera ha cuestionado la política migratoria del Gobierno central, pues considera que "arroja a las mafias" a quienes intentan llegar a España y genera problemas tanto a los inmigrantes que logran entrar como "a los que no".
Argumenta la decisión del cierre cautelar del CREADE de Pozuelo ya que las instalaciones estaban al 83% de su capacidad y que el Gobierno pretendía introducir a 400 personas más.
El consistorio de la localidad, notificó el cierre cautelar tras una inspección impulsada por el Consistorio donde el centro carecía de las licencias necesarias para albergar a residentes de forma permanente.