La Selección española ha sucumbido este domingo ante Francia en la final de la Liga de Naciones (1-2) disputada en el estadio italiano de San Siro, donde logró adelantarse por medio de Mikel Oyarzabal, pero sufrió la remontada de su rival con los tantos de Karim Benzema y Kylian Mbappé, el segundo muy polémico por fuera de juego no pitado.
No pudo ser para el joven equipo de Luis Enrique, que al igual que en la Eurocopa, donde Italia fue su verdugo en semifinales, se quedó muy cerca de lograr algo más grande. Con Gavi de nuevo en el once titular, muestra de la decidida apuesta del asturiano por la juventud, le quitó la posesión a Francia (64%) y fue mejor durante muchos minutos, pero los picotazos de dos de los mejores delanteros del mundo bastaron para evaporar sus esperanzas.