El PSOE obtuvo este domingo el peor resultado de su historia en Extremadura, obteniendo 18 diputados y dejándose 10 escaños con respecto a los últimos comicios. El candidato del PSOE en Extremadura, Miguel Ángel Gallardo, obtuvo este domingo el peor resultado de su formación y, en rueda de prensa, reconoció que era "muy malo". Sin embargo, no dimitió. Se remitió a una reunión mañana de la ejecutiva regional para valorar los resultados.
"Lo destaco sin paliativos", señaló Gallardo, después de agradecer a "los cientos de personas" que lo han votado. Tras admitir "los resultados adversos" planteó "para qué han servido las elecciones". "María Guardiola las convocó para conseguir una mayoría absoluta, para convertir Extremadura en un experimento que claramente ha fallado", añadió.
El Partido Popular consigue 29 escaños y gana las elecciones autonómicas de Extremadura con el 93,77% de los votos escrutados. Le faltaron cuatro escaños para la mayoría absoluta, que se sitúa en 33. Por su parte, Vox sube y alcanza los 11 asientos. El PSOE consigue 18 diputados y Unidas por Extremadura, 7.
Fuentes de Ferraz señalaron que "no es un buen resultado" porque "los nuestros se han quedado en casa". Asimismo, asumieron que "el candidato no era el idóneo". Además, afirmaron que "tenía una situación complicada", pero "no había tiempo" para promocionar a otro candidato. Pese a que Gallardo nunca fue un 'hombre de Sánchez', ya que en anteriores ocasiones se ha enfrentado contra candidatos proclives al presidente y más cercanos a Ferraz.
Desde Ferraz siguieron el escrutinio Torró y su equipo más cercano compuesto por Borja Cabezón y Anabel Mateos. También asistió la portavoz de la Comisión Ejecutiva Federal, Montse Mínguez, quien mañana realizará una rueda de prensa a las 13.00 horas tras la reunión de este órgano.