La familia del teniente coronel Antonio Tejero ha tenido que salir al paso de los rumores que la pasada semana anunciaban falsamente su fallecimiento. El protagonista del intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 pasó por un delicado estado de salud, pero ha experimentado una notable mejoría que le ha permitido recibir el alta hospitalaria y continuar su recuperación en el entorno familiar.
Su hijo, Ramón Tejero, ha explicado que su padre “está estupendamente”, y ha relatado cómo durante los días más críticos “en medio de ese dolor, estábamos recibiendo llamadas y mensajes dándonos el pésame”.
Ramón Tejero también ha querido ofrecer una imagen más personal de su padre, alejada de su papel en la historia reciente de España. “Mi padre siempre ha sido el mismo. Es un hombre tremendamente tierno, cariñoso”, asegura. Y añade: “El hecho del asalto al Congreso no define para nada a mi padre. Yo no lo veo como el señor que entró al Congreso, sino como el que nos ha acompañado toda la vida”.
El teniente coronel, que cumplió 93 años el pasado mes de febrero, continúa su recuperación en casa tras haber superado las complicaciones médicas que pusieron en alerta a su entorno más cercano