Indignados y muy enfadados. Así se encuentran los comerciantes de Plaza de España. Aseguran que las obras están durando demasiado, al igual que el ruido y el polvo que ocasionan los trabajos de reforma.
Denuncian que las obras para reformar esta zona del centro de la capital están causándoles muchas pérdidas. Algunos hablan de un perjuicio de un 40% de las ventas.