La festividad de la Virgen de la Paloma, además de actos religiosos y tradicionales, ha sido también escenario de enfrentamientos políticos.
Los principales partidos de la oposición han aprovechado la jornada para lanzar duras críticas al Gobierno municipal por la gestión de los servicios de emergencia, especialmente en lo relativo a la prevención de incendios y la situación del cuerpo de bomberos.
Desde Vox, se ha acusado a la clase política de ser “inútil” y de dedicarse a “colonizar todas las administraciones” sin aportar soluciones reales a los problemas de la ciudadanía.
En su intervención, el partido ha señalado que los incendios que afectan a distintas zonas del país “se apagan en otoño e invierno”, en referencia a la necesidad de realizar labores preventivas fuera de temporada alta.
Por su parte, representantes de PSOE y Más Madrid han denunciado la falta de personal y medios en el cuerpo de bomberos.
“Nos faltan 195 bomberos, que son absolutamente imprescindibles para nuestra ciudad”, han señalado, achacando la situación a la “desidia y mala gestión” del alcalde José Luis Martínez-Almeida y su equipo.
La alcaldesa en funciones defendió la actuación del Ayuntamiento, asegurando que el presupuesto destinado a los bomberos se ha duplicado en los últimos años y que la plantilla alcanzará los 1.700 efectivos.
Además, recordó que entre 2015 y 2025 se han convocado un total de 530 plazas, de las cuales solo 20 corresponden al mandato de Más Madrid, mientras que las 500 restantes se han convocado bajo la actual administración.
El debate deja en evidencia que, más allá de las celebraciones populares, la seguridad y los servicios de emergencia siguen siendo un terreno de confrontación política en la capital.