Cada conversación con IA puede gastar medio litro de agua: el Gobierno quiere controlarlo
- Los sistemas que alimentan la inteligencia artificial consumen grandes cantidades de recursos: una conversación breve con ChatGPT puede implicar hasta medio litro de agua
El Gobierno español prepara un real decreto para controlar el impacto ambiental de los centros de datos, infraestructuras clave para el funcionamiento de la inteligencia artificial y otros servicios digitales.
La medida llega en un momento en el que estos centros consumen cada vez más electricidad y utilizan sistemas de refrigeración intensivos, muchos de ellos basados en el uso de agua.
De hecho, ¿sabes que una conversación breve con ChatGPT puede gastar hasta medio litro de agua? La propia inteligencia artificial reconoce que, en interacciones más complejas, el consumo puede llegar incluso a 2 o 3 litros por sesión.
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Los modelos de IA generativa requieren un poder de cálculo mucho mayor que otros servicios digitales. Para evitar fallos en los servidores, los centros de datos necesitan sistemas de refrigeración potentes, siendo el agua una de las opciones más utilizadas por su eficiencia y bajo coste.
Actualmente, más de 1.000 millones de personas utilizan esta tecnología a diario, y se estima que cada interacción con modelos como ChatGPT suma hasta 310 gigavatios hora (GWh) al año.
Sin embargo, la información publicada por grandes empresas como Apple o Microsoft sobre su consumo energético y uso de agua suele ser autodeclarada y sin verificación independiente, lo que dificulta la transparencia.
Con el nuevo decreto, el Ejecutivo busca obligar a las instalaciones a informar de forma precisa y auditada sobre su eficiencia energética y consumo de agua.
Factores como la ubicación de los centros, la calidad de sus sistemas de refrigeración y su estrategia tecnológica serán claves para reducir su huella ambiental en el futuro.
