Su negocio arruinado por culpa de las humedades. Maria Luisa tine 82 años y lleva más de un lustro luchando para que la Comunidad de Propietarios del edificio donde tiene su tienda de lámparas arregle el patio e impida que el sotano de su tienda se llene de humedades.
Denuncia que los humedades del edificio les están ocasionando daños irreparables, con miles y miles de euros en género almacenados en cajas y muchos de ellos estropeados por la filtración del agua.
Ella responsabiliza al presidente de la Comunidad de no querer reparar los desperfectos del patio para que deje de entrar el agua a su tienda. Éste se defiende y niega que la responsabilidad recaiga en el edificio. Dice que "las humedades vienen de las lluvias o de la parcela de al lado".
Maria Luisa ha recurrido dos veces a la justicia, pero ésta, de momento, le ha negado la razón.
Mientras tanto, ella lucha, con serrín en su manos, que el agua pueda continuar dañando el g´nero almacenado.