La calle Segovia es una de las más antiguas de Madrid y se sabe, desde hace más de 700 años, que el puente de Segovia era el inicio del camino hacia Segovia. El viaducto de la calle de Segovia es la prolongación de la calle Bailén. Uno de los primeros vehículos en cruzar el viaducto de la calle de Segovia fue el coche fúnebre con los restos de Calderón de la Barca, acompañado por 5 carruajes. Los edificios más importantes son el Palacio de Anglona y la casa del Pastor con el escudo más antiguo de la villa.
La calle de Santa Isabel se encuentra entre la calle de Atocha y la plaza de Antón Martin. La hija de Felipe II, Isabel Clara Eugenia, fundó un convento en Alcalá de Henares. Felipe II trajo el convento a esta calle y por varios avatares que sucedieron, le pusieron el nombre de Santa Eugenia. La mujer de Felipe III, Margarita de Austria, decidió hacer un convento escuela para las niñas de los sirvientes de palacio.
Miraflores de la Sierra es un municipio de Madrid que se encuentra al norte de la Comunidad. Este pueblo se llamaba originalmente Porquerizas por los corrales de cerdos cercanos a las casas. Una de las actividades turísticas del pueblo es la gruta de Begoña. En esta gruta la gente se casa y celebran misas en verano. Uno de los establecimientos del municipio más destacados es Productos de la Sierra. Esta tienda vende productos producidos en el pueblo. El producto estrella de la tienda es el queso de la zona.
En la calle del Arenal había un arroyo que se llamó Arenal y antes se llamó el arroyo de la zarza. Al haber un curso de agua, en la zona se produjo una hondonada que formó bancales de arena en los costados del arroyo. Uno de sus edificios destacados es la Iglesia de San Ginés. En la iglesia de San Ginés tuvo lugar el bautismo de Quevedo y el matrimonio de Lope de Vega.
Uno de los sitios emblema de la calle del Arenal es la Chocolatería San Ginés. La Chocolatería San Ginés es la chocolatería más conocida de Madrid. El museo de Ratón Pérez se encuentra en la calle Arenal. Luis Coloma escribió un cuento para el rey Alfonso XIII de niño cuando se le cayó el diente de leche contándole que aquí se vivía el ratón Pérez en una caja de galletas en la confitería Prast.