Es una imagen recurrente en puntos concretos del centro de Madrid. Personas sin hogar durmiendo en plena calle. Muchos con problemas de adicción al alcohol o a las drogas. Un triángulo que podemos recorrer en unos 10/15 minutos a pie: las plazas de Tirso de Molina, Jacinto Benavente y Nelson Mandela.
Las dos primeras están dentro del plan de remodelación del Ayuntamiento de Madrid. Un triángulo que, según asociaciones de vecinos y comerciantes, cada vez está más deteriorado. Colchones de personas sin techo que duermen en la calle, consumo de alcohol y drogas y robos. Un problema que afecta también a las calles aledañas, como Ave María, Tribulete, Amparo, Mesón de Paredes o Embajadores.
"No tenemos nada, solo la calle", dice una de estas personas sin hogar. Sin embargo, los vecinos alertan de la creciente inseguridad en la zona. "A partir de las nueve de la noche no pases por la plaza de Lavapiés", alerta una residente.
El Ayuntamiento de Madrid reconoce la existencia de puntos negros en la zona y trabaja en ello. Pide más presencia policial, aunque la Jefatura de Policía no ha notado un incremento en la criminalidad.