La empresa Servinabar ha podido servir para el reparto de grandes cantidades de dinero en comisiones del entramado de sociedades y familiares de los principales implicados en el caso que afecta al ex secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán. Entre los beneficiarios se contarían un cuñado de Santos Cerdán percibió más de 61.000 euros, el ex presidente de la SEPI, y la pareja del número dos de la presidenta navarra María Chivite.
La Hacienda Tributaria de Navarra ha remitido al Tribunal Supremo, instructor del caso Koldo, la documentación que obra en su poder sobre la empresa Servinabar, su creador, Antxon Alonso, y el exdirigente socialista Santos Cerdán.
Un cuñado de Santos Cerdán, Antonio Muñoz Cano, cobró más de 61.000 euros de Servinabar, la empresa que está presuntamente en el epicentro de las supuestas adjudicaciones irregulares de obra pública investigadas en el 'caso Koldo', por trabajar como albañil durante cuatro años.
Muñoz Cano es hermano de la mujer de Cerdán. Según el informe, cobró en 2019 un total de 3.363, cifra que subió a los 16.255 euros en 2020, para llegar a los 21.233 en 2021 y a 20.818 euros en 2022.El citado informe de la Hacienda Foral desvela también que la hermana de Cerdán, Belén Cerdán, cobró 22.200,84 euros en 2020 de Servinabar por su trabajo como administrativa, según ha asegurado la interesada.
Más de 100.000 euros abonó Servinabar al expresidente de la SEPI, Vicente Fernández mientras la novia del socialista Ramón Alzórriz percibió 102.834 euros.
Todos, beneficiarios de una misma empresa: Servinabar. Una firma navarra que en 2015 apenas facturaba 13.000 euros y que terminó acumulando casi 6 millones en contratos públicos.
La Guardia Civil señala al ex número tres del PSOE, Santos Cerdán, como socio clave. Llegó a tener el 45% y la compró por solo 6.000 euros.