El campo madrileño tiene las horas contadas según Cipri Guillén, uno de los productores más jóvenes de la Vinícola de Arganda. Cipri es la tercera generación de agricultores argandeños. A sus 43 años, y a pesar de ser uno de los productores más jóvenes, cree que mantener esta actividad es casi heroico, por las dificultades a las que se enfrenta: “no veo un relevo generacional”, se lamenta en Madrid Directo.
La última pica para los agricultores es el precio de la uva, que ha aumentado un 14% a las puertas de fin de año. Para Cipri es una subida “insuficiente”, teniendo en cuenta el incremento de los precios de producción.
"El kilo de uva nos lo están pagando a unos 20 céntimos"
El gasoil ha subido un 74%. Lo mismo ocurre con las semillas, los fertilizantes o los productos pétreos, que han subido sus precios más de un 375%, en gran medida por el incremento del precio de la luz. Y el kilo de uva nos lo están pagando a unos 20 céntimos, relata Cipri.
A esto hay que sumar que la cooperativa de Arganda se ha convertido en la bodega con el IBI más caro en España, asegura Cipri: “Vamos a tener que pagar 33.000 euros, con la tasa máxima permitida”, se lamenta.
"La agricultura española está abocada a la desaparición"
“Hemos hecho el año de siembra más caro para la agricultura española”, se queja Cipri. “Cada vez es más insostenible y va quedando menos gente. Con este panorama, la agricultura española está abocada a la desaparición”, sentencia este productor.
Cipri reclama también mayor atención a los vinos de Madrid: “deberían ser un referente aquí porque tenemos categoría y 6 millones de consumidores”, explica. A pesar de los esfuerzos de la cooperativa de Arganda por modernizar procesos y cultivos, los productores no ven recompensa.