“La dependencia es la enfermedad más temida por los geriatras”. Así de contundente se muestra en declaraciones a Fórmula Salud la doctora Cristina Bermejo, jefa del servicio de Geriatría del hospital Puerta de Hierro de Majadahonda.
La falta de autonomía personal de la persona mayor condiciona demasiado su salud. Con frecuencia esa circunstancia se acompaña de polimedicación, insomnio, soledad y depresión que impactan notablemente en la salud mental.
El aislamiento social, junto con el miedo al contagio por la COVID-19 y los numerosos fallecimientos de familiares y amigos cercanos y el consiguiente duelo, han tenido consecuencias en la salud mental de diferentes colectivos, entre los profesionales sanitarios y otros grupos directamente expuestos al virus y los colectivos poblacionales más vulnerables, como los mayores.