El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha inaugurado en Móstoles una planta piloto del Instituto de Catálisis y Petroleoquímica (ICP-CSIC) para convertir biomasa y residuos agroalimentarios en productos de alto valor para distintos sectores industriales.
La planta de 110 m2 se ubicará en las instalaciones de EDIBON International, S.A., en Móstoles. Su objetivo es validar un proceso que convierte estos residuos en celulosa de alta pureza con aplicaciones en la industria paplera o la textil.
De la lignina extraída se podrán fabricar resinas, materiales aislantes o incluso usarse como alternativa al grafito en baterías.
Otro de los derivados resultantes del proceso es el furfural, que se usa como disolvente y como materia prima para fabricar plásticos, resinas y otros materiales.
Para lograr esta transformación, el proceso emplea un producto que facilita las reacciones químicas y que puede recuperarse casi por completo para reutilizarse, lo que reduce el impacto ambiental y económico.
La planta tendrá capacidad para tratar hasta dos toneladas de biomasa/residuos al año, con una capacidad de producción de 500-1000 kg de celulosa, 200-500 kg de lignina y 100-300 kg de furfural anuales.
“La tecnología que vamos a demostrar representa una alternativa real y sostenible para la valorización de residuos agroindustriales”, señaló David Martín Alonso, investigador principal del proyecto en ICP-CSIC.