En la Comunidad de Madrid faltan 2.000 guardias civiles. El problema es mayor en los pueblos, especialmente en los de la sierra donde los alcaldes denuncian más inseguridad y más robos sobre todo ahora en verano cuando triplican la población. Los ayuntamiento aseguran que en verano ha subido un 20% los delitos.
Por ello, el gobierno regional y los sindicatos de la Benemérita piden una incorporación urgente de efectivos. Denuncian que en lugares como Navacerrada hay 6 agentes para 23.000 habitantes. El ejecutivo regional asegura que es un nuevo ejemplo del maltrato del gobierno de Pedro Sánchez a los madrileños.
Delegación del Gobierno habla de casi 400 efectivos más este verano y 347 alumnos, pero los alcaldes aseguran que lo datos son falso. El Boalo- Cerceda- Matalpino debería tener 17 efectivos, un día como hoy trabajan 2 para atender a 40.000 personas.
En Navacerrada debería haber 17 pero solo están trabajando 6 efectivos para 23.000 habitantes. Su alcalde denuncia que "lo que se esta haciendo por parte del gobierno es que asumamos los municipios la responsabilidad de seguridad del Estado". "Hemos llegado a convenios para que en ocasiones puntuales podamos contar con policías de estos municipios que nos ayuden en las fiestas patronales donde hay mucha concentración de gente", dice.
En Colmenarejo deberían tener 60 guardias civiles pero hay 45; los otros 15 están destinados en unidades operativas. "En fiestas hemos tenido que contratar seguridad privada y en la piscina también porque no tenemos guardias civiles que lo puedan cubrir", remarca.
Mientras, los sindicatos exigen un refuerzo urgente. Así desde Jucil denuncian que "en la Guardia Civil no damos abasto; se han puesto parches con agentes eventuales o en practicas que pasan a profesional pero seguimos padeciendo una grave falta de personal". "Hay 100 unidades de agentes y tan solo un terco están en prevención, es decir en la calle", dice.