El acto de entrega se ha llevado a cabo en sede judicial y con más privacidad que en la primera cita del martes, cuando el enorme revuelo mediático y los momentos de tensión vividos en el punto de encuentro familiar en el que se fijó inicialmente el intercambio.
Esto llevó al juez de Primera Instancia 3 de Granada a aplazarlo con mayores condiciones de intimidad y seguridad por recomendación de los especialistas que asistieron al niño.
Por indicación de la juez, los progenitores han llegado a primera hora de esta mañana al lugar acordado acompañados exclusivamente de sus abogados con media hora de diferencia y en coche privado con acceso directo al garaje para evitar una sobreexposición.
Juana Rivas fue la primera en llegar al edificio poco después de las nueve de la mañana, media hora antes que su expareja. Minutos después, Rivas abandonaba el lugar en coche junto a su abogado, mientras que Arcuri hacía lo propio en compañía de su hijo y su abogado y escoltados por la Policía Nacional.
Según han informado fuentes judiciales, la entrega del menor se ha producido después de que el Juzgado de Instrucción 9 de Granada haya resuelto la petición de medidas cautelares que el mayor de los hijos de la expareja, Gabriel, solicitó este jueves en la querella que presentó contra su padre y una psicóloga.
La titular del juzgado instructor, con el apoyo de la Fiscalía, ha rechazado esas medidas cautelares, lo que ha permitido este viernes completar el proceso.
Hasta que lo ha hecho, Juana Rivas ha estado con Daniel y el equipo de psicólogos y ha podido despedirse del menor antes de abandonar con su abogado la sede judicial.
El niño ha completado su encuentro con el padre acompañado de las psicólogas y trabajadoras sociales designadas y sin interferencias.