Visitamos uno de los principales destinos vacacionales de playa del mundo. Costas paradisiacas, temperatura constante todo el año y diversión garantizada son algunas de las señas de identidad del país, que atrae a visitantes... y algunos hasta se quedan.
Conocemos a César en Punta Cana, que nos muestra algunas de las principales playas como Playa Blanca o Playa Bávaro, donde hay hasta 50 resorts "todo incluido" para disfrutar de días de sol y lujo. Punta Cana surgió como destino vacacional en los años setenta, cuando un grupo de empresarios norteamericanos, el más destacado de ellos Frank Rainieri, construyeron apenas unas pequeñas cabañas que con los años han dado lugar a una costa llena de resorts en los que no falta de nada.
Visitamos Boca de Yuma, el último pueblo de pescadores de la República Dominicana, y Verón, uno de los principales núcleos de población y comercio del país.
Josué ha montado un centro de buceo en Samaná, en cuya bahía se pueden ver ballenas desde la propia playa, eso sí, entre enero y abril. Nos enseña el curioso hotel Puerto Plaza, de reciente construcción, y que tiene forma de barco. En Las Terrenas, la principal ciudad de la provincia, encontramos comercios locales de tabaco y también una de las playas más bellas, Punta Bonita. También damos un tranquilo paseo por la capital de Samaná, Santa Bárbara, que fue el principal punto de recepción de esclavos procedentes de África.
Nos desplazamos con Gustavo, madrileño de Alcobendas, hasta Uvero Alto, una de las playas menos masificadas de la zona de Punta Cana, en la provincia de Altagracia. Tras comprobar el estado de las olas, nuestro surfero madrileño nos cuenta que allí también preocupa el tema del virus zika. De hecho, en República Dominicana se han registrado 15 muertes relacionadas con el zika en lo que va de año.
Metidos en pleno selva dominicana, en la Sierra de Altagracia, nos encontramos con Runners Adventures, una empresa dedicada a los deportes de aventura. Nos armamos de valor y nos tiramos por la tirolina más alta del Caribe, con un tramo que alcanza casi un kilómetro. La experiencia es alucinante.
Seguimos nuestro recorrido hacia Montaña Redonda subidos en un autocar digno de ver y experimentar. Un trayecto movido con recompensa: en la cima las vistas son impresionantes, sobre todo en columpio...
Dejamos la montaña y volvemos a la playa, en esta ocasión la de Macao, considerada una de las mejores por la UNESCO. Muy cerca vive Gustavo, en el Cocotal: una de las urbanizaciones más exclusivas de Punta Cana, en la que la mayoría de sus residentes son extranjeros.
En Puerto Plata, al norte de la República Dominicana, quedamos con Gabriela, una madrileña de Majadahonda que se casó con un promotor inmobiliario de la zona y propietario del complejo residencial Riviera Azul.
Visitamos Casa Colonial, un exclusivo hotel de 5 estrellas en el que cada habitación es diferente. Eso sí, el precio es casi prohibitivo: dormir aquí cuesta entre 250 y 500 dólares la noche.
En San Felipe de Puerto Plata, la capital de la provincia, paseamos por la Plaza de la Independencia. San Felipe tiene 200.000 habitantes y en la época colonial fue la ciudad más importante del país. Actualmente guarda su típica arquitectura victoriana. Puerto Plata es el sitio de los artistas, de los pintores, de los escultores y de los intelectuales.
Visitamos el Museo del Ambar, del que se extrajo un fragmento para la saga cinematográfica Jurassic Park. Nos cuentan la historia del ámbar y los diferentes tipos que existen. En la República Dominicana es donde existen los fósiles de ambar más antiguos y puros del mundo.
La fortaleza conocida como el 'Morro de San Felipe', construída por el rey español Felipe II hace las veces de Museo de la Ciudad. Se construyó en el S.XVI para evitar la entrada de piratas y corsarios.
Nos subimos, por 9 euros, al único teleférico que hay en el Caribe para visitar la Loma Isabel de Torres y despedimos nuestro paradisíaco destino subidos a un barco con mucha marcha.