El objetivo es evitar que la temperatura media del planeta no aumente más de dos grados centígrados a finales de siglo. Es más, el texto incluye la recomendación de limitar el calentamiento a un grado y medio, y para logarlo, es necesario reducir dráticamente la emisión de gases contaminantes, algo que no será fácil ni barato, ya que los países firmantes tendrán que aportar 90 mil millones de euros anuales a partir de 2020.
Enorme paso para el futuro del planeta, victoria para las futuras generaciones, acto capital para la humanidad, de este modo han calificado algunos líderes mundiales el histórico acuerdo alcanzado en la Cumbre del Clima de París.
Sin embargo varias asociaciones ecologistas consideran que el texto es insuficiente. Critican que no se establezca un proceso de descabonización, es decir, del abandono de las energías fósiles. La organización lamenta que el texto no establezca cómo llevar a cabo este ambicioso objetivo, que la temperatura media del planeta no aumente más de dos grados centígrados a finales de siglo.
Además Greenpeace recuerda que para lograr el acuerdo, que marca el inicio de un nuevo modelo de desarrollo, han hecho falta veintiún años de cumbres del clima y doce meses de intensos esfuerzos diplomáticos. El texto, aprobado este sábado, debe de ser ratificado por todos los países la próxima primavera, entra en vigor en 2020 y será revisado cada cinco años para que los países fijen metas para la reducción.