El almacén que tiene Ayuntamiento en Casa de Campo ha vuelto a ser objetivo de los cacos. Por segunda vez en dos semanas han desaparecido semáforos y farolas. Operarios municipales han cambiado la valla. Otra más robusta y segura rodea ahora la instalación para evitar los robos. Los ladrones se han llevado del recinto 20 cabezas de semáforo y 140 farolas. No había vigilancia y eso favoreció el asalto.
Nadie vió ni oyó nada y eso a pesar de que a escasos metros del almacén hay unas dependencias policiales y a pesar de que los ladrones tuvieron que usar un caminón grande e incluso una grúa para sacar el material robado, que es voluminoso y pesado. La voz de alarma y la denuncia en la comisaría la presentaban los trabajadores a las 8 de la mañana.
La policía investiga ahora quien puede estar detrás de este robo. El destino del botín, sospechan, es la venta en el mercado negro que, al peso, se paga muy bien en chatarrerías e incluso se exporta al extranjero.
