Tras la crisis de peste porcina africana registrada en Cataluña, la Comunidad de Madrid ha intensificado las medidas de vigilancia y control ante la preocupación por la superpoblación de jabalíes. El Gobierno regional recuerda que no se ha confirmado ningún caso de esta enfermedad en Madrid y que el plan de control poblacional está activo desde el pasado mes de abril.
Los jabalíes son un reservorio natural del virus, motivo por el que su elevada densidad y su constante movimiento incrementan el riesgo de transmisión a los cerdos domésticos, lo que podría ocasionar importantes daños económicos y sanitarios. Además, su presencia en zonas urbanas supone un riesgo adicional por posibles accidentes de tráfico o interacciones con personas y animales domésticos.
Jaulas trampa y vigilancia diaria
Dentro del operativo activado por la Comunidad, se utilizan jaulas trampa preparadas con maíz para atraer a los animales. Víctor, trampero de patrulla Fauna, explica que el mecanismo permite capturar a uno o varios ejemplares gracias a un sistema de contrapesos que cierra la trampilla cuando el jabalí accede al alimento. Estas jaulas cuentan además con una segunda puerta que facilita la entrada de más animales si ya se han habituado a la estructura.
El equipo revisa los dispositivos cada mañana al amanecer para garantizar que los animales capturados permanezcan el menor tiempo posible en su interior y evitarles estrés o sufrimiento innecesario. La efectividad de estas trampas varía según la época del año, siendo mayor cuando escasea la comida en el entorno natural.
Aumento de capturas en la última década
Ismael Hernández, subdirector de Biodiversidad de la Comunidad de Madrid, señala que las capturas comunicadas por los cazadores —procedentes de cacerías, batidas y permisos extraordinarios— han aumentado un 30 % en los últimos diez años, reflejando el crecimiento sostenido de la población de jabalíes en la región. Según explica, una densidad excesiva siempre eleva el riesgo de aparición de enfermedades como la peste porcina africana.
Qué hacer si se encuentra un jabalí muerto
Ante la posibilidad de descubrir un jabalí fallecido en el campo, las autoridades recomiendan no tocar el animal y avisar inmediatamente al 112 para que sean los agentes forestales o el Seprona quienes se hagan cargo. Hernández destaca que, si el ejemplar no presenta signos de disparo o atropello, existe la posibilidad de que haya muerto por enfermedad, por lo que es importante evitar cualquier contacto y, si es posible, señalizar la zona hasta la llegada de los equipos especializados.