Muchos lo hacen por oficio, y otros están de paso para sacarse un dinero extra para pagar sus estudios o para hacerse el verano, pero los datos dejan ver la realidad de muchos: las horas extras no abonadas superan las cobradas. Entre los meses de abril y junio de este 2018, las plantillas hicieron 418.200 horas a la semana, fuera de su jornada, sin remuneración. La hostelería se ha convertido en el sector donde hay el mayor porcentaje de asalariados inmigrantes y en el que casi el 25% de los contratos tiene una duración de una semana o menos.