Un empresario de Zaragoza creó una organización contra el cáncer infantil llamada Linceci para ayudar supuestamente a niños enfermos en Perú.
Para ello, vendía objetos solidarios, organizaba eventos benéficos y realizaba donaciones a hospitales para obtener visibilidad.
Esta organización, presuntamente creada por Roberto Pérez, su esposa y cuatro personas más comenzaron a pedir dinero para comprar unos cochecitos para los menores del hospital Ramón y Cajal, y regalarlos, pero esos juguetes habían sido donados.
En cuanto a sueldo, Roberto cobraba 15.000 euros al mes y a su mujer unos 5.000. Una muestra más de la manera de lucrarse de estas personas a las que la Policía acusa de estafa agravada y de pertenencia a organización criminal.
Los miembros de la asociación fueron detenidos el pasado miércoles y todos se encuentran en prisión salvo la esposa del supuesto cabecilla, que ha quedado en libertad con cargos.
Recaudaron 2 millones de euros y en una ocasión donaron diez camas a hospitales de Perú. Por eso desconfiaron de ellos los padres de la asociación de niños con cáncer de Aragón, que fueron quienes denunciaron.
Según hemos podido saber, la investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones. Además, el periodista de investigación de este programa, Dani Montero, nos ha contado más detalles.
“La Policía ha determinado que ese dinero no iba a enfermos con cáncer, sino a enriquecer las arcas de estas personas”, ha explicado.
