Un informe de la Comisión Europea constata que la corrupción afecta también a la economía y es por eso que la percepción en las empresas del estado de la corrupción sigue aumentando hasta el punto de que consideran que, en España, hay más ahora que hace 7 años.
Esto se traduce en que la percepción de las empresas sobre la corrupción ha empeorado con respecto a 2018, y los últimos datos dicen que el 91% de las compañías creen que la corrupción está extendida, 2 puntos más que en 2018, situándose entre las más altas de la Unión Europea donde la media está en el 64%, además para el 51% de los empresarios españoles, supone un problema para hacer negocios en nuestro país.
Por otro lado, la contratación pública está considerada un área de alto riesgo de corrupción en nuestro país, si nos remitimos al Eurobarómetro, porque el 77% cree que hay corrupción en esos contratos.
De todo ello hemos hablado con Lorenzo Amor, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Autónomos (ATA), que denuncia todas las trabas e inspecciones a los que son sometidos los trabajadores por cuenta propia mientras la corrupción aflora en otros sectores: “Me encantaría que este celo que se tiene con los los autónomos habitualmente, se hubiera tenido con todos estos que han estado, supuestamente, cobrando mordidas”.