La ciudad de Tokio ha nombrado a Godzilla residente especial de la capital y embajador del turismo del distrito de Shinjuku, donde se ha instalado una reproducción a tamaño real de la cabeza del monstruo, informó la agencia Kyodo.
La escultura está colocada a 52 metros de altura sobre un complejo comercial del barrio de Kabukicho que abrirá sus puertas la próxima semana, y da la impresión de estar mirando a los viandantes desde la parte posterior del edificio. Los ojos del enorme monstruo emiten destellos rojos, mientras que sus aletas traseras brillan en tonos azules y por su boca brotan flashes de luz y vapor, como si estuviera descargando su ataque "aliento atómico".
Además, a partir de la semana que viene, se proyectarán luces sobre la fachada del edificio acompañadas del sonido del rugido de Godzilla y de sus pisadas en un espectáculo nocturno diario.
El inmueble en el que a partir de ahora los viandantes podrán encontrar a este referente de la ciencia ficción nipona es propiedad de la productora cinematográfica Toho, propietario de la franquicia desde el primer film de Godzilla estrenado en 1954.
En su interior contará con salas de cine, restaurantes y un hotel dotado de una "habitación Godzilla" que estará decorada con motivos relacionados con el monstruo gigante. Toho anunció hace unos meses que rodará este año una nueva película en Japón del monstruo Godzilla que se estrenará en 2016.
Este nuevo film será el largometraje número 29 producido por la nipona sobre el famoso saurio radiactivo, y la primera rodada en Japón desde el estreno en 2004 de "Godzilla: final wars", cuando se celebró el 50 aniversario de la criatura.
Además de las casi treinta películas japonesas de Godzilla, Hollywood estrenó en 2014 su segunda versión del famoso personaje (la primera data de 1998), en coproducción con Toho, y Legendary Pictures, el estudio responsable, anunció el pasado año que prepara una secuela también dirigida por Gareth Edwards para 2018.