El acusado de golpear y apuñalar a una mujer que pudo salvar su vida tras llegar al hospital con el arma clavada en el cuello, hace dos años en el Puente de Vallecas, ha reconocido los hechos, se ha arrepentido, y ha aceptado seis años de prisión por el delito de intento de homicidio. El procesado, Hassan A., marroquí de 23 años, ha afirmado que apuñaló a la víctima, Mónica R., quien junto con su marido le había alquilado una habitación en su casa, porque se la había ido "la cabeza".
Los hechos se remontan al 27 de mayo de 2008, cuando Hassan golpeó a la mujer, de origen venezolano, y le clavó un cuchillo días después de que la pareja le hubiera pedido que dejara libre la habitación porque ya no le querían como inquilino.
Según relató la víctima tras salir del hospital, en un momento dado se miró en el espejo y vio "que tenía algo en el cuello". Mientras llegaba el Samur, Mónica llamó a su marido, al que sólo acertó a decirle que la habían intentado matar, y avisó a su trabajo explicando que no podría ir porque le habían pegado "y tenía algo clavado en el cuello".
La mujer salvó la vida gracias a que el cuchillo de cocina, de unos diez centímetros de hoja, no le afectó ningún vaso sanguíneo de importancia, ni a las cervicales, a pesar de tenerlo hundido hasta la empuñadura en la parte posterior de la cabeza.
El agresor, que tendrá que indemnizar a la víctima con 44.000 euros, se enfrentaba hoy en la Audiencia Provincial de Madrid a ocho años de cárcel de acuerdo con la petición del fiscal, y a diez años según la acusación particular.