Un grave incendio en el noroeste de California (EEUU) causó un muerto y forzó la evacuación de unas 12.000 personas este fin de semana, mientras que más de 9.000 bomberos seguían combatiendo hoy dos decenas de fuegos en todo el estado, que atraviesa desde hace meses una notable sequía.
Al menos 21 incendios seguían activos la tarde del domingo en todo el estado, incluido un fuego en el norte de estado que duplicó su tamaño durante la noche del sábado. Ese incendio ha quemado más de 190 kilómetros cuadrados (47.000 acres), provocado la muerte a un bombero y destrozado 24 viviendas y 26 cabañas, según informó el diario Los Angeles Times.
Ese incendio, cercano a la localidad de Clear Lake, apenas estaba contenido en un 5% la tarde del domingo y las autoridades habían ordenado la evacuación de 12.000 personas, indicó el rotativo.
El gobernador de California, el demócrata Jerry Brown, declaró el viernes el estado de emergencia en todo el territorio por los incendios, y consideró en un comunicado que "la grave sequía y temperaturas extremas han convertido buena parte del estado en un polvorín".
Alrededor de 9.600 bomberos de todo el estado se desplazaron hacia los puntos críticos para combatir los incendios a lo largo del fin de semana, según informó la oficina de Brown.