Tomasito no para. Hace percusión en su pecho mientras "reza" por bulerías, "posa" bailando para las fotos y responde a borbotones preguntas sobre una carrera que empezó al lado de Lola Flores y cuya memoria, tan inquieta como su cuerpo de 52 kilos, ha decidido recuperar en el disco "Ciudadano gitano".