Para algunos de ellos es su primer viaje en avión. Para otros, incluso, la primera vez que salen del hospital. Son más de 200 niños que tienen cáncer y han empezado sus esperadas vacaciones: una semana en Irlanda gracias a la fundación Aladina.
Los diferentes niños que disfrutarán de las vacaciones proceden de Alicante, Málaga, Las Palmas, Zaragoza, Madrid, Sevilla, Albacete o Navarra.
Se van a Barresttown, Irlanda, donde les espera un campamento mágico. En este campamento realizarán todo tipo de actividades, como nos cuentan ellos mismos “vamos a hacer escalada, montar a caballo, piragüismo y tirolina”.
Actividades destinadas a que recuperen la confianza perdida en el hospital. Hospital donde siendo tan pequeños ya han aprendido la asignatura pendiente de los mayores “aprovechar el presente porque no sabes lo que te va a pasar en el futuro”, pero sobre todo a ser feliz vendo la vida desde otro punto de vista.
