En Casa de Campo, los equipos de emergencia preparan futuras posibles intervenciones mediante sofisticados simulacros, donde buscan personas desaparecidas, restos óseos de cadáveres y también ropa o armas de posibles violaciones.
La clave de este tipo de pruebas es el tiempo: mientras menos se tarde en realizar la intervención, más posibilidades existen de que el operativo tenga éxito.
Preparación para el perfeccionamiento
Comienzan la búsqueda con un equipo de 8 personas, con un jefe de unidad. En esta ocasión simulan el cadáver de un niño al que buscan y encuentran de manera cuidad y meticulosa.
Esta preparación sirve para que llegado el momento los operativos funcionen a la perfección, sin contaminar el escenario y manteniendo bien cuidadas las pruebas.