Indignación en el Gobierno de Ayuso por el "boicot" en 16 bases forestales: "No lo vamos a permitir"

Indignación en la Comunidad de Madrid por los sabotajes registrados en las bases de las brigadas forestales en unos días de intensa lucha contra el fuego.

Este domingo se conocía que 16 de esas instalaciones habían aparecido dañadas en sus accesos, además de material, como un helicóptero en la de Valdemorillo.

Tanto Isabel Díaz Ayuso como el consejero de Medio Ambiente e Interior han lamentado estos hechos justo cuando la vida de personas y el patrimonio natural están en riesgo por el fuego.

78 incendios de bosque bajo y vegetación se han producido en Madrid desde el pasado 15 de julio cuando los bomberos forestales iniciaron su huelga. Este fin de semana se han registrado incidentes en 16 bases, mientras los huelguistas se desvinculan de lo ocurrido.

Carlos Novillo, consejero de Medio Ambiente, Agricultura e Interior ha denunciado el "boicot" de estas bases, lo que supone la puesta en riesgo de "cientos de hectáreas y vidas de los madrileños". Una situación que, ha asegurado, "no lo vamos a permitir".

Así, el consejero ha reconocido que, aunque "cualquier reivindicación de cualquier colectivo laboral es loable", esta está teniendo lugar en unas fechas de gran peligro de incendio forestal, lo que a su vez pone en riesgo vidas humanas.

Los efectivos de las brigadas forestales de la Comunidad de Madrid, que forman parte de la empresa pública Tragsa, iniciaron el martes 15 de julio una huelga de un mes en plena campaña del plan especial contra incendios forestales (Infoma) con el objetivo de reclamar la negociación de un nuevo convenio colectivo y una mejora "urgente" de sus condiciones económicas.

Desde el Gobierno regional piden al comité de huelga que se desvincule de estas actuaciones y aseguran que Madrid está dispuesto a ayudar a solucionar un conflicto que Ayuso califica de "sin sentido" y cuya solución está en manos del Gobierno central.

"Nosotros el jueves pasado, sin tener esa competencia de negociación porque pertenecen a la empresa pública Tragsa, estuvimos reunidos con ellos, con todos los representantes viendo de qué manera la Comunidad de Madrid puede ayudar a que se pueda resolver este conflicto", ha destacado al respecto Novillo.