Una de las curiosidades que nos hemos encontrado en nuestro viaje a Bangkok, en Tailandia, ha sido presenciar insitu cómo la población religiosamente se para y hasta se cuadra cuando, dos veces al día, a las 8 de la mañana y a las 6 de la tarde, suena el himno nacional. El respeto de la población por su himno es digno de elogio...