La Guardia Civil ha detenido a los once integrantes de una trama liderada desde la Comunidad Valenciana por dos hermanos que durante los últimos diez años se embolsaron alrededor de cinco millones de euros estafando a más de un millón de personas a través de los denominados SMS Premium.
Un fraude masivo que cometían con diversos cebos, en palabras del comandante jefe del Grupo de Delitos Telemáticos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, Óscar de la Cruz, que ha explicado que la red contaba con una veintena de empresas ficticias y un centro de operaciones, un "call center" ubicado en Alicante, desde donde lanzaban los SMS para que picaran las víctimas.
"Ponte en contacto conmigo para la segunda entrevista de trabajo" o "te estoy buscando en Facebook y no te encuentro" eran algunos de los anzuelos en forma de SMS que empleaba los estafadores para buscar la respuesta de la víctima. En el momento en que contestaban ese mensaje, el usuario pagaba alrededor de 1,50 euros.
Los trabajadores del "call center" -alrededor de ocho personas conocedoras del fraude, españoles y que estaban explotadas- tenían órdenes de establecer una conversación de mensajería con la víctima con el objetivo de que siguiera gastando dinero. Y para ello, no dudaban, ha señalado De la Cruz, incluso en derivar ese diálogo por mensaje hacia contenidos eróticos.
En cualquier caso, si el estafado no se percataba enseguida de que era objeto de timo y continuaba "chateando", podía llegar a recibir en su domicilio una factura de entre 1.000 ó 2.000 euros.