El cantante José Manuel Soto ha lamentado la escasa presencia institucional y cultural en la despedida de Manuel de la Calva, miembro del mítico Dúo Dinámico. La capilla ardiente, que ha cerrado a las 8 de la tarde, ha dejado más silencios que apoyos visibles: apenas un ministro, ninguna palabra del presidente y un vacío casi absoluto de referentes del mundo de la cultura. “La despedida pues se echa en falta un poco más de presencia de la gente que está en el Gobierno, gente de la cultura”, ha señalado Soto, que no ha ocultado su decepción ante lo que considera un trato desigual hacia ciertas figuras artísticas.
En sus palabras, esta ausencia no ha sido casual. “Los artistas que no somos de izquierda no interesamos tanto”, ha afirmado, asegurando que ha vivido en primera persona un veto en “todos los ayuntamientos de izquierdas”. También ha reconocido que su carácter abierto ha tenido un precio: “Yo he sido hablador y eso lo he pagado”. Y ha ido más allá al valorar la situación política actual: “Lo peor que le puede pasar a España es que siga Pedro Sánchez”.