Una 'app' relacionada con "El juego del calamar" puede robar nuestros datos bancarios
- La aplicación ha sido eliminada recientemente por Google Play
Ciberdelincuentes han diseñado una aplicación vinculada con la exitosa serie de televisión "El juego del Calamar" con el propósito de acceder a nuestros datos bancarios y "hackear" nuestra cuenta. Ha sido la firma de ciberseguridad ESET la que dio la voz de alarma en un comunicado publicado en su blog corporativo.
🦑 “El juego del calamar” usado como cebo por el malware Joker para infectar dispositivos Android.
— ESET España (@ESET_ES) October 19, 2021
📱 Utilizan una supuesta app de fondos de pantalla de la conocida serie para conseguir instalar esta amenaza.
➡️ https://t.co/gyfZzLUFb9 pic.twitter.com/xefrOQ0mEh
Dentro de la aplicación se incluye un troyano bancario llamado Joker cuya finalidad es penetrar en el teléfono móvil, identificar el país donde se encuentra el usuario y, finalmente, controlar el mando del terminal para contratar servicios sin que lo conozca el propietario.
'El juego del calamar' llega a un colegio de Madrid
Paco Pérez, experto en ciberseguridad explica en 120 Minutos los peligros de instalar esta aplicación (eliminada recientemente por Google Play). "Los ciberdelincuentes saben que nuestro móvil es una fuente de información muy valiosa".
El experto recuerda que la aplicación se ha extendido rápidamente entre el público juvenil, que comenzó a descargarla de manera masiva, sin saber que "estaban abriendo la puerta a ese troyano que estaba accediendo a su información personal, fotos, contactos e incluso información bancaria".
¿Qué podemos hacer?
¿Cuál es la clave para evitar este peligro cuando nos descargamos una aplicación? El experto recomienda aumentar nuestro nivel de alerta o prevención, buscar en Internet opiniones de otras personas que puedan avisarnos de los peligros de esta aplicación o leer con detenimiento las condiciones o descripción de esa aplicación.
En caso de dudas existe el teléfono 017 y contrastar los datos de la aplicación.
