La tecnología, aliada en la lucha contra la diabetes

  • Una aplicación transmite al móvil los niveles de azúcar al paciente, a sus médicos y a sus familiares al momento

La tecnología se pone al servicio de los pacientes diabéticos. Un nuevo dispositivo da mas tranquilidad a los pacientes de diabetes y a sus familias. Pueden controlar a distancia cúal es su nivel de azúcar en sangre, y directamente, enviar una alerta al móvil. A los médicos les permite un mejor control en casos de pacientes con mayor dependencia, y sobre todo, en niños.

APLICACIONES SENCILLAS Y EFICACES

Se trata de un pequeño botón que se aplica en el brazo, por ejemplo, y que al acercar el móvil, envía a éste los niveles de azúcar en sangre. Asi puede conocerlos el paciente a la vez que sus médicos y sus familiares. No es la única aplicación para los smartphones, que han simplificado y mucho la monitorización de estos enfermos gracias a app sencillas y que en todo momento están en nuestro pequeño ordenador de bolsillo. También existen otras soluciones más avanzadas y orientadas a profesionales que tienen como fin facilitar el diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad.

La diabetes es una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no produce insulina suficiente o cuando el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce. En España más de 5,3 millones de personas viven con diabetes tipo 2, aunque prácticamente la mitad lo desconoce. A nivel global, la cifra alcanza los 422 millones de afectados.

Aunque se trate de una patología crónica aún sin cura definitiva, el avance de la tecnología está permitiendo hacer más llevadero el día a día de los pacientes que la padecen (ya sea la diabetes tipo 1 o la tipo 2). Acabar con la conocida rutina de los "pinchazos", tanto para poder medir sus niveles de glucosa en sangre como para poder administrarse la insulina que requiere el organismo en cada momento, es una de las grandes ventajas que ha aportado la tecnología sanitaria en los últimos años.

LAS BOMBAS DE INSULINA

La gran revolución a este respecto ha sido la aparición de las bombas de insulina, y más en concreto las que van asociadas a sensores de glicemia. Se trata de dispositivos que, por un lado, permiten medir la glucemia (cantidad de azúcar en sangre) del paciente en tiempo real y sin pinchazos y, por otro, mediante un pequeño parche, infundir la insulina que necesita al paciente.

Existen otras alternativas que combinan las aplicaciones móviles con medidores externos de glucosa, yendo todavía más allá y ofreciendo una monitorización continua. como un pequeño dispositivo que se conecta directamente a un teléfono iOS y permite medir la glucosa desde casi cualquier parte. La información se transmite directamente a la aplicación, que almacena y analiza los datos emitiendo alertas si es necesario. Hay aplicaciones que funcionan de manera similar pero que admite hasta 17 medidores de glucosa distintos.