Julio Iglesias, el cantante español más internacional, fue premiado en Londres por su inagotable éxito en un acto en el que pidió a su público que le continúe apoyando, porque, si no, le faltaría "oxígeno".
"Me hacéis sentir vivo. El viento de vuestras palabras es como mi oxígeno, no me dejéis morir", pidió el cantante ante periodistas de todo el mundo al recoger el premio otorgado por su discográfica Sony Music como el artista latino más exitoso de todos los tiempos.
En una multitudinaria rueda de prensa previa a su actuación de mañana en el Royal Albert Hall de Londres, por primera vez en diez años, Julio Iglesias habló también del "amor gratuito" que profesa a su país, España, y expresó su apoyo a la cantante barbuda Conchita Wurst, ganadora en Eurovisión.
A sus 70 años y recién llegado de su gira estadounidense por Nueva York y Miami, el madrileño dijo que sigue pensando en el futuro, que "tiene que ver" con todos los que le apoyan, compran sus discos y acuden a sus conciertos, y los que año tras año llevan su música "en el corazón".
"Empecé por vosotros y terminaré por vosotros", apuntó el cantante, que ha tenido que agregar una segunda actuación en Londres para el próximo lunes 19 por la demanda que causó su regreso al escenario donde interpretó por primera vez su famosa versión de "Begin The Beguine" (Volver a empezar) en 1982.
Tras la rueda de prensa, el cantante, que ha entonado durante décadas éxitos como "Hey" ante miles de personas en los cinco continentes, confesó, en una entrevista con Efe, que le encantaría "estar nervioso antes de los conciertos".
"Lo mío no es nervioso, es mucho más profundo. No entiendo mi vida, si no estoy en el escenario", apuntó Julio Iglesias, que ha ofrecido más de 5.000 actuaciones desde que comenzó su carrera musical en 1968, tras su triunfo en el Festival de la Canción de Benidorm, con su tema, escrito por él mismo, "La vida sigue igual".
MAS DE 300 MILLONES DE COPIAS
Icono de hombre latino por su música y su fama de seductor, Iglesias confesó a Efe que se siente "excitado", porque, a su edad septuagenaria y con una gira por los escenarios de todo el mundo programada para este año, "parece como si el tiempo no corriera tan deprisa".
"Aunque el aire es mucho más fino, aún soy capaz de respirar ese oxígeno tan escaso", comentó el cantante, que con más de 300 millones de copias de sus álbumes en catorce idiomas es el artista que más discos ha vendido en más lenguas del mundo.
Su música, banda sonora de infinitos romances desde los años 70, está compuesta por "palabras sencillas que se puedan decir en cualquier momento" y que la "gente la entienda al unísono", según el cantante, compositor de muchas de sus letras.
En una afirmación sincera, Julio Iglesias reconoció que "no es necesario ser un grandísimo cantante" para triunfar y consideró que, aunque "el estilo posiblemente" sea una pieza fundamental para el éxito, "la clave es la pasión".
"Que te enamores de la gente y la gente se enamore de ti, es una relación profundísima a la que te habitúas y se hace tan grande que es inseparable", apuntó el artista español, que reside en Miami (EE.UU.) junto a su esposa Miranda y sus hijos.
Considerado el cantante europeo con más éxito comercial de la historia, Julio Iglesias aseguró que le gusta la mujer barbuda Conchita Wurst, que ganó Eurovisión el pasado domingo.
"Es una supercantante, una mujer increíble, muy sensible", apuntó el artista, que representó a España en el Festival de Eurovisión en 1970 con "Gwendolyne", uno de sus temas más reconocidos y que entonces le llevó al cuarto puesto en la clasificación.
Antes de los dos conciertos que ofrecerá mañana martes y el lunes 19 en el Royal Albert Hall de Londres, Julio Iglesias ha actuado en Nueva York, en el mítico Carnagie Hall, y en Miami, y posteriormente ofrecerá conciertos en otras ciudades de Europa, incluida España, y Latinoamérica.