Tras tres semanas y 13.000 kilómetros de viaje, el primer tren de mercancías de la línea ferroviaria directa entre China y España, la más larga del mundo y a la que instituciones y empresarios de ambos países han bautizado como "la nueva ruta de la seda", ha llegado a Madrid.
En el acto de recibimiento en la terminal ferroviaria de Abroñigal, autoridades de ambos países han asistido a la llegada de este convoy inaugural, procedente de la ciudad de Yiwu -considerado el centro de producción y distribución de bienes más grande del mundo- y cargado, principalmente, de artículos navideños para los bazares.
El tren volverá a recorrer los más de 13.000 kilómetros que separan Madrid de Yiwu después de Navidad, para llevar al este jamón, vino y aceite de oliva a tiempo para la celebración del año nuevo chino.
El ferrocarril partió el pasado 18 de noviembre de Yiwu, en la provincial de Zhejiang, con cuarenta vagones y, desde entonces, ha recorrido 13.000 kilómetros a través de ocho países: China, Kazajistán, Rusia, Bielorrusia, Polonia, Alemania, Francia y España.
A lo largo de este recorrido se han realizado cambios de ancho de vía, trasvases de contenedores y cambios de locomotora cada 800 kilómetros, así como la descarga de parte de la mercancía. Finalmente, treinta de los cuarenta contenedores han llegado a Madrid ante la expectación de autoridades y empresarios, así como de numerosos medios de comunicación de ambos países.
Se trata de la tercera ruta ferroviaria directa entre China y Europa -las otras dos enlazan con Alemania-, por la que los productos llegan a Madrid en 21 días, frente a los aproximadamente treinta que necesitan para recorrer esa misma distancia en barco.
El viaje piloto que hoy ha concluido en Madrid constituye "un hito histórico para el sector del ferrocarril", según la ministra de Fomento, Ana Pastor, quien ha subrayado que se trata del viaje más largo del mundo recorrido por un tren, superior a la suma de los míticos Transiberiano y Orient Express.
"Hoy se ha abierto una nueva ruta para una España más próspera", ha señalado la ministra, ya que esta línea de mercancías reforzará a España como centro de distribución de productos llegados de China.
De la misma manera, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha destacado que esta ruta, que deja pequeña "la épica del mítico Transiberiano", coloca a la capital de España como "un enclave geoestratégico mundial" que "sin duda sabrán aprovechar y rentabilizar" los inversores.
Es "una línea de doble sentido" que ofrece un acceso directo al mayor mercado de venta al por mayor de productos del mundo, ha destacado la alcaldesa, que ha señalado que, curiosamente, una gran parte de los más de 30.000 ciudadanos chinos que residen en la ciudad son originarios de la provincia de Zhejiang, lugar de procedencia del tren de mercancías China-España.
Ana Botella ha subrayado los lazos que une a Madrid con China y en este sentido ha recordado que la capital de España firmó en 1985 un acuerdo de hermanamiento con Pekín, que en septiembre de 2015 cumplirá 30 años, y que en la ciudad tiene su sede el centro cultural de China y el Instituto Confucio.
Tras agradecer la intervención del Ministerio de Fomento, Adif y Renfe en este logro, Botella ha declarado que "hoy Madrid se sube al tren de una nueva etapa de cooperación y de relaciones comerciales entre China y España que hace historia".
El encargado de negocios de la embajada china en España, Huang Yazhong, ha celebrado que hoy se haya abierto "oficialmente la línea regular de mercancías más larga del mundo", que constituye "un nuevo avance en la apertura" del país.
De la misma manera, el gobernador de Zheijiang, Zhang Shuming, ha destacado en una carta que esta línea "reduce enormemente la distancia", en términos de tiempo, "entre los extremos oriental y occidental del continente euroasiático".
Al mismo tiempo, se rebajan los costes de importación y exportación contribuyendo así "a la salida de los productos de China hacia el mundo" y facilitando la importación de otras mercancías. La puesta en marcha de esta línea ha sido posible gracias al compromiso adquirido por los gobiernos español y chino en el encuentro comercial celebrado entre ambos el pasado septiembre.