Intervenidas casi 10.000 falsificaciones de productos de móviles en tiendas de Usera

  •  Se han intervenido 5.909 artículos falsos de telefonía de Apple, Samsung y Xiaomi, así como otros 4.000 productos como embalajes u hologramas que imitaban los originales

La Policía Municipal de Madrid ha intervenido en siete locales del distrito de Usera casi 10.000 falsificaciones de productos de telefonía de marcas como Apple, Samsung y Xiaomi, las cuales se vendían como auténticas con un gran detalle y a precios sólo ligeramente inferiores a los oficiales.

Se han intervenido 5.909 artículos falsos de telefonía de Apple, Samsung y Xiaomi, así como otros 4.000 productos como embalajes u hologramas que imitaban, en algunos "con mayor definición que los originales", a los oficiales.

Por estos hechos se ha investigado a once personas como presuntos autores de delitos contra la propiedad industrial.

La que ha sido bautizada como Operación Poma se inició después de que el área de Consumo de la Policía Municipal observara un incremento en la venta al público de accesorios falsos de estas marcas en comercios convencionales.

Su grado de detalle y los precios similares a los originales --entre 15 y 60 en función del artículo-- hacía pensar al público que se trataba de productos oficiales, por lo que habían logrado un gran éxito de ventas, según las mismas fuentes.

PRIMERA INCAUTACION

Hacia principios de año el área de Policía Judicial de la Policía Municipal de Madrid se incautó de gran cantidad de estos artículos e investigó a una primera persona como presunta autora de un delito contra la propiedad industrial.

A raíz de esa primera intervención se obtuvo información sobre un grupo de personas de Bangladesh que importaban de forma clandestina estos productos desde China. Tras varias inspecciones en locales de venta al público de Usera, se encontró un punto de almacenamiento donde se recibían los productos, así como los certificados o envoltorios, también de imitación, para el montaje y empaquetado final antes de su venta.

Además, los agentes encontraron una serie de facturas plagadas de irregularidades, como la ausencia de códigos de identificación fiscal, el desglose del IVA o los datos de los compradores y vendedores, por lo que junto con el delito contra la propiedad industrial, también se han levantado actas por delito contra la hacienda pública.