El Instituto San Isidro de Madrid, el más antiguo de España en funcionamiento, con cuatro premios Nobel entre sus alumnos ilustres y heredero directo de los Reales Estudios de San Isidro, celebra este curso el IV Centenario de su fundación en 1625.
Situado en el corazón de la ciudad, cerca de la Plaza Mayor, se creó como Colegio Imperial por la emperatriz María de Austria en 1603, convirtiéndose en Reales Estudios de San Isidro por el rey Felipe IV veintidós años después bajo la gestión de la Compañía de Jesús.
Hasta su conversión en Instituto San Isidro de enseñanza secundaria en 1845, sus paredes de granito vivieron años de historia convulsa, en la que los jesuitas fueron expulsados de España tres veces entre 1767 y 1835, período en el que se estableció allí distintas cátedras y se abrió la biblioteca al público.
Seminario, academia, facultad e instituto
Sus aulas acogieron el Seminario de Nobles, la Academia de Matemáticas, la Facultad de Medicina, la Escuela de Arquitectura, la Facultad de Filosofía y Letras y la de Artes, dedicándose el edificio a la docencia de forma casi ininterrumpida desde hace cuatrocientos años.
"Los mejores tratados de enseñanza de España fueron redactados por personas vinculadas a este centro", que hasta 1936 tuvo pedagogos relacionados con la Institución Libre de Enseñanza y "la corriente filosófica del krausismo, ligada al positivismo", explica su director Rafael Martín al inaugurarse los actos del IV centenario que se prolongarán durante todo el curso.
"Seguimos siendo un centro público puntero, de referencia, que a través de la renovación pedagógica ha mantenido encendida la llama del saber", subraya Martín, quien destaca como una de las señas de identidad de este IES bilingüe con 1.300 alumnos su comunidad educativa "muy inclusiva y plural".
Alumnos ilustres
Como alumnos del Colegio Imperial de los jesuítas destacan Calderón de la Barca, Francisco de Quevedo y el físico Juan Eusebio Nieremberg, mientras que en los Estudios de San Isidro figuran Mariano José de Larra, Manuel Tamayo y el pintor Rosales. También el francés Víctor Hugo que estudió un año en el Seminario de Nobles (1811-1812).
Ya en el instituto estudiaron José de Echegaray (Nobel de Literatura 1904), Jacinto Benavente (Nobel de Literatura 1922), Pío Baroja, los hermanos Antonio y Manuel Machado, Vicente Aleixandre (Nobel de Literatura 1977), Francisco Ayala, Miguel Miura, José Luis Sampedro y Camilo José Cela (Nobel en 1989).
Al ingeniero Juan de la Cierva se suman los historiadores Tuñón de Lara y Sánchez Albornoz; el periodista José Ortega, padre de Ortega y Gasset; el jurista Joaquín Garrigues y el tenista Manolo Santana.
También políticos como José Canalejas, Eduardo Dato, el conde de Romanones, Nicolás Salmerón, Julián Besteiro y Arias Navarro. Entre los artistas figuran Manuel Galiana o Emilio Gutiérrez Caba.
Las primeras mujeres llegaron tras 1880, como la pintora Remedios Varo y María Zambrano -colaboradora, aunque no alumna-, y sumaban el 50% del alumnado en la Segunda República, pero fueron excluidas en el franquismo y solo volvieron en 1984.