El Cristo de los Gitanos y la Virgen de las Angustias salen a la calle a pesar de la lluvia

  • El mal tiempo amenazaba con impedir la procesión por segundo año consecutivo, pero al final dio un respiro a la cofradía

Madrid mira al cielo y de momento la primera procesión, la del Miércoles Santo, con la Virgen de los Gitanos sí pudo celebrarse. La lluvia no impidió que viéramos por primera vez en procesión a la Virgen María Santísima de las Angustias. La talla se estrenó bajo palio. La lluvia le dio una tregua.

La lluvia ha concedido una tregua a la hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Salud, más conocida como 'Los Gitanos', que finalmente ha podido sacar este miércoles en procesión a la talla de María Santísima de las Angustias.

La hermandad ha visto peligrar la procesión debido a la fina pero constante lluvia que ha caído durante toda la tarde en la capital y no ha acordado sacar la talla hasta cinco minutos antes de la hora prevista, según ha explicado a Europa Press un portavoz de la organización.

La procesión comenzó finalmente pasadas las 21.30 horas de la parroquia de Nuestra Señora del Carmen (situada en el número 10 de la calle el Carmen), donde regresará unas dos horas después tras recorrer el centro de la capital.

Así, la procesión ha discurrido por Salud, Carmen, Puerta del Sol, Correo, Marqués de Pontejos, Marquesa viuda de Pontejos, plaza de Santa Cruz, plaza de las Provincias, Salvador, Lechuga, Imperial, Toledo, Latoneros, plaza de Puerta Cerrada, Cuchilleros, Cava de San Miguel, plaza de San Miguel, Mayor, Bordadores, Arenal, Puerta del Sol, Preciados, Galdós, Carmen, Salud y vuelta a la parroquia.

LA HISTORIA DEL PASO

El paso de Nuestro Padre Jesús de la Salud fue realizado en 1996 por el escultor sevillano Angel Rengel, si bien la Hermandad data de 1753, cuando fue fundada en el trianero convento del Espíritu Santo por Sebastián Miguel de Varas y otros gitanos.

Sin embargo, nunca llegó a salir de las puertas del convento, ya que ese mismo año fue trasladada al Pópulo, donde destacó en su labor de ayuda en las sacramentaciones que se hacían en los extramuros de la ciudad. En el siglo XIX, con la desamortización y cierre de este convento, pasó a San Esteban en 1837, después a San Nicolás en 1860, y finalmente a San Román en 1880, donde el incendio de 1936 destruyó todas las posesiones de la hermandad.

Tras permanecer varios años en Santa Catalina, volvió otra vez a San Román en 1950. En 1999, se trasladó definitivamente a su sede actual, lo que antiguamente fue el colegio de El Valle.

El primer paso de la procesión representa a Jesús Nazareno con la cruz a cuestas. Fue tallado en 1937, siendo restaurada en 1960 y nuevamente en 1979 y 1982. En estilo neobarroco, dorado e iluminado por cuatro faroles en metal dorado, representa a un Cristo con potencias de oro de ley y túnica morada. El palio tiene orfebrería plateada en los respiraderos con capillas y en los varales. Los candelabros de cola son de plata de ley.

Por su parte, el paso de palio de la Virgen de las Angustias, realizada en 1938, lleva corona en oro de ley, mientras el palio está hecho en terciopelo morado, bordado en oro, y manto en terciopelo burdeos con bordados también en oro. Esta imagen está muy vinculada a la Casa de Alba, que donó un manto para la Virgen con su escudo así como unos respiraderos en 2009 para el palio, así como al rey Fernando VII, que le concedió incluso el título de Real.

Los cofrades, por su parte, visten túnica blanca, cíngulo y botonadura de color morado, capa blanca y antifaz de terciopelo morado, zapatos negro y guantes blancos. La Hermandad cuenta incluso con composiciones musicales propias que se utilizan en la procesión como la de 'Los Gitanos', de Manuel Mejías Pérez; 'Nuestras Señora de las Angustias', de Francisco Mena del Rosal; o 'Jesús de la Salud', de Pedro Braña Martínez.