La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) mantiene los paros parciales convocados para el próximo fin de semana, tras una reunión infructuosa celebrada con Enaire, y amenaza con "recrudecer, posiblemente" las protestas al término del verano.
El sindicato había solicitado a la empresa gestora de navegación aérea en España, y matriz de Aena, la celebración de una reunión negociadora "como muestra de buena voluntad" y con la esperanza de alcanzar un acuerdo para evitar alteraciones en el tráfico aéreo y molestias a los pasajeros los días 25 y 26 de julio.
USCA ha explicado hoy en un comunicado que había pedido la reunión después de que la empresa "no hubiera abierto ninguna vía de contactos desde las últimas jornadas de huelga", los pasados 11 y 12 de julio.
El sindicato asegura que Enaire ha vuelto hoy a dar muestras de "su inmovilismo, su cerrazón y su negativa a entablar cualquier tipo de diálogo con los controladores para alcanzar una solución negociada", a pesar de haber asegurado que mantiene el diálogo abierto y permanente con el sindicato para evitar nuevos paros.
Con esta actitud, añade el sindicato, Enaire "pone de manifiesto su falta de responsabilidad para resolver el conflicto" y obliga a USCA a mantener los paros y "a recrudecer, posiblemente, las protestas al término del verano".
Las dos nuevas jornadas de paros de tres horas se llevarán a cabo el próximo sábado, entre las 10.00 y las 13.00 horas, y el domingo, 26 de julio, ente las 17.00 y las 20.00 horas