La décima convención para fanáticos de Star Wars, conocida como Star Wars Celebration, abrió sus puertas en Anaheim, en el sur de California, donde ofreció un pequeño adelanto de la película que dará continuidad a la famosa saga iniciada por George Lucas en 1977.
La presidenta de Lucasfilm, Kathleen Kennedy, sucesora de Lucas al frente de la compañía, y el director J.J. Abrams desvelaron el segundo "teaser" del filme Star Wars: Episode VII - The Force Awakens, que verá la luz en diciembre, y en el que se sientan las bases de una trama cuyos pormenores aún se desconocen.
El breve vídeo enseña el cadáver del villano Darth Vader mientras se escucha la voz de Luke Skywalker (Mark Hamill) hablando sobre cómo la Fuerza ha pasado en su familia de generación en generación.
En los últimos instantes del montaje, el actor Harrison Ford reaparece caracterizado como Han Solo y acompañado del personaje de Chewbacca, al que se le escucha decirle que han regresado a su hogar. "En esa última escena empecé a llorar", dijo tras la proyección Dan García, un incondicional de "Star Wars" desde que tenía 5 años y que viajó hasta el evento desde Arizona con su esposa Jo.
García se sentía de nuevo como un niño y su entusiasmo era compartido por los miles de asistentes, algunos de los cuales pasaron la noche a la intemperie para asegurarse un asiento en el auditorio donde Kennedy y Abrams estuvieron acompañados por parte del elenco de la séptima película de "Star Wars".
La ovación al vídeo fue tal que la organización lo pasó dos veces seguidas para regocijo de los presentes.
Abrams, fan confeso de "Star Wars" que en el pasado llegó a disfrazarse del personaje Jawa por Halloween, explicó que, a pesar de sus reticencias iniciales para tomar las riendas de The Force Awakens, está lejos de arrepentirse de la decisión.
"Aunque hay momentos de puro horror (por la responsabilidad que supone), la realidad es que nunca me lo he pasado tan bien en mi vida. La oportunidad compensa el riesgo", comentó Abrams que admitió que el filme no podrá contentar "a todo el mundo".
El realizador de Star Trek y creador de la serie Lost insistió en que ha tratado que la película tenga el espíritu de la trilogía inicial, con el uso de decorados reales siempre que era posible en vez de montajes por ordenador, y dio a conocer un nuevo planeta del universo Star Wars, Jakku.
Ese lugar desértico ambientado en Emiratos Árabes Unidos es donde los espectadores se encontrarán con los nuevos personajes de la buscavidas Rey (Daisy Ridley) y el soldado Finn (John Boyega), cuyo destino terminará ligado al del piloto Poe Dameron (Óscar Isaac).
Ridley, Boyega e Isaac relataron su incredulidad cuando lograron sus papeles para esta producción, y Boyega contó su caza de autógrafos en el rodaje, en especial su experiencia con Harrison Ford, a quién le extrañó la petición del joven actor. Ford, convaleciente de su accidente de avioneta, no acudió a la convención aunque Kennedy sí adelantó que estará en la promoción del filme a finales de año.
Hasta el centro de convenciones de esta urbe californiana, junto al parque Disneyland, sí se desplazaron los veteranos Carrie Fisher (Pricesa Leia), Mark Hamill (Luke Skywalker), Anthony Daniels (3-3PO) y Peter Mayhew (Chewbacca), todos ellos parte de las primeras películas de Star Wars, que no ocultaron su emoción al estar frente a frente con sus admiradores.
"Como está cambiando la administración, la dirección, no es el mismo equipo, pues a lo mejor refresca la historia, yo pienso que sí puede ser una mejora", comentó Rubén Delgadillo, aficionado del club de fans mexicano Endor System.
"Lo importante es ver cómo van a hilar (a los antiguos personajes) en la nueva película. Me imagino que es como la despedida", añadió su compañero Jorge Morales, veteranos de estas celebraciones de "Star Wars" a la que acudía por primera vez su compatriota Diego Adame del club 501st Legion Mexican Garrison.
La jornada sirvió para conocer además al nuevo robot de la saga, BB8, así como la renovada indumentaria de los soldados galácticos.