El Atlético de Madrid, que empató 1-1 con el Arsenal inglés en el Emirates Stadium de Londres en la ida de las semifinales de la Liga Europa, un partido que disputó 80 minutos con un jugador menos, tiene al menos diez motivos para creer en sus opciones de llegar a la final de la competición en Lyon (Francia).
Contar con un gol en campo contrario, de valor doble en caso de empate en la eliminatoria, haber resistido 80 minutos con diez futbolistas con la sobresaliente actuación del portero esloveno Jan Oblak y del delantero francés Antoine Griezmann, y tener la vuelta en el estadio Wanda Metropolitano, donde solo ha concedido dos derrotas en 26 partidos, son algunas de las razones.
1. EL RESULTADO DE LA IDA
El 1-1 en Londres es positivo se mire por donde se mire. Tanto por haber resistido el asedio del conjunto gunner durante 80 minutos, con 24 disparos londinenses y 10 de ellos a puerta, solo encajando un gol del francés Alexandre Lacazette pese a contar el Atlético por uno menos por la expulsión por doble amarilla del croata Sime Vrslajko.
La guinda fue el gol del galo Antoine Griezmann, en una jugada aislada en el minuto 82 cuando el Atlético llevaba toda la segunda mitad achicando agua en campo propio, que le permite llevarse un gol en cancha ajena, de valor doble en caso de empate, que era objetivo inexcusable en la visita al Emirates.
El francés aprovechó un centro largo del uruguayo José María Giménez, junto a la permisividad de su compatriota Laurent Koscielny y la mala fortuna del otro central del Arsenal, el alemán Shkodran Mustafi, que se resbaló en la jugada, para batir en dos tiempos al guardameta colombiano David Ospina y marcar un gol muy valioso.
2. LA CAPACIDAD DE SOBREPONERSE DEL EQUIPO
Probablemente ni el peor de los augurios habría dibujado un inicio del encuentro más adverso para el club rojiblanco. Ante una salida imponente del Arsenal, volcado al ataque, el conjunto rojiblanco se quedó sin Vrsaljko con una primera amarilla innecesaria y rigurosa, y una segunda entrada intolerable a un jugador que está advertido de expulsión.
Para colmo de desdichas, el nivel de excitación del banquillo rojiblanco llegó a su máximo minutos después, cuando una falta del jugador del Arsenal Héctor Bellerín sobre el francés del Atlético Lucas Hernández, que no fue considerada merecedora de tarjeta por el francés Clement Turpin, desató una serie de protestas exageradas por parte del entrenador argentino Diego Pablo Simeone, que fue expulsado por el colegiado francés. Con diez y sin entrenador.
3. UN SEGURO DE NOMBRE JAN OBLAK
Mientras el Atlético tenía que procesar que el resto del partido lo iba a disputar con un futbolista menos y sin su entrenador, y el Arsenal estaba volcado sobre su portería, el conjunto rojiblanco se mantuvo en el encuentro gracias a un pilar: Jan Oblak, que detuvo dos lanzamientos de Lacazette y Danny Wellbeck en los primeros 10 minutos y tuvo otras dos intervenciones más antes del descanso, cuando el Atlético tuvo sus mejores momentos.
Lo que vino en la segunda mitad fue una auténtica exhibición del meta esloveno, pese al gol de Lacazette de cabeza en el minuto 61, especialmente una parada a tres minutos del final, una tremenda estirada a disparo del inglés Aaron Ramsey que permitió al Atlético irse con un 1-1 de sabor muy dulce.
4. EL MOMENTO DE GODÍN Y GIMÉNEZ
Los dos centrales uruguayos del Atlético temían al juego aéreo y la velocidad del conjunto dirigido por el francés Arsène Wenger, motivo por el cual Giménez fue elegido en lugar del montenegrino Stefan Savic, pero lo que no podían esperar es un asedio del conjunto londinense con un futbolista menos.
Ante la obligación de achicar balones fuera de su área, retener el balón para dar oxígeno al equipo cuando era posible y despejar los centros laterales, ambos cumplieron con brillantez su labor, especialmente el capitán Godín, que fue el de las grandes noches europeas del Atlético. Giménez, por su parte, vio el desmarque de Griezmann en el minuto 82 y sirvió un pase largo que acabó en gol.
5. EL DERROCHE DE THOMAS
El centrocampista ghanés, en la temporada de su confirmación en el primer equipo, la que más minutos está disputando en su carrera en el Atlético, ofreció un derroche físico en Londres, aun teniendo que realizarlo desde el minuto 10 al 75 como lateral derecho en lugar del expulsado Vrsaljko.
En esa banda tuvo que sufrir las acometidas del alemán Mesut Özil y del lateral izquierdo español Nacho Monreal, pero aún con eso tuvo la capacidad de generar una ocasión clara de gol en el 37 progresando con el balón hasta el área contraria y cediendo a Griezmann, que se encontró con una buena parada de Ospina.
6. LAS DEBILIDADES DEL ARSENAL
Si para el Atlético, el del minuto 10 era el peor escenario posible, los aficionados del Arsenal se las prometían felices cuando veían al contrario con un jugador menos y sin entrenador con todo el partido por delante.
Sin embargo, el conjunto de Wenger, con toda la calidad que atesora su plantilla y el constante asedio al que sometió a los rojiblancos, con 24 disparos, solo ubicó ocho de ellos entre los tres palos de la portería de Jan Oblak. El Atlético, aun permaneciendo replegado prácticamente todo el partido, realizó cinco tiros a puerta. Poca renta para un 72% de posesión.
Para colmo, en una acción aislada en la que el central francés del Arsenal Koscielny tenía ventaja para despejar un balón en la pugna con Griezmann, todo lo que tenía que salir mal para los londinenses se produjo: error del zaguero francés al intentar despejar, resbalón de Mustafi y fortuna del rojiblanco al recuperar el rechace de Ospina y poder marcar sobre la llegada de Mustafi.
7. ANTOINE GRIEZMANN
La razón número 7 de esta lista es, como la número 3, recurrente en cada partido del Atlético y tiene nombre propio: el de Antoine Griezmann, el delantero que guía la ofensiva del Atlético y que se ha especializado en aprovechar las pocas ocasiones que le ofrece su equipo en goles de una rentabilidad incalculable.
El punta galo tuvo que jugar desde el minuto 10 como interior izquierdo por la inferioridad numérica de los suyos, y con todo supo capitalizar dos ocasiones en el final de la primera mitad, cuando su equipo logró hacer olvidar durante unos minutos que contaba con un futbolista menos.
Durante el segundo tiempo, Griezmann tuvo que fajarse para tapar huecos, pero con todo el esfuerzo incluido, fue capaz de tirar el desmarque para el centro de Giménez, pelear con Koscienly para forzar el error de su compatriota, y creer en sus posibilidades para disparar no una, sino dos veces, para conseguir el empate.
8. LA BUENA RACHA CONTRA EQUIPOS INGLESES
El Atlético mantuvo ayer en Londres la racha que dice que no pierde en Inglaterra desde hace ocho años, ya que desde que lo hizo por 2-1 contra el Liverpool en otra semifinal de Liga Europa -la que le llevó al título en 2010- ha cosechado tres empates y una victoria, ante Chelsea, Leicester y Arsenal.
De nueve eliminatorias contra equipos ingleses, el Atlético ha superado siete (solo le echaron el Derby County y el Bolton Wanderers), y en los últimos tiempos dos de ellas le han servido para llegar a una final, la de la Liga Europa 2009-10 antes citada, y la de la Liga de Campeones 2013-14 al superar al Chelsea.
9. EL FORTÍN DEL WANDA METROPOLITANO
Las semifinales viajarán la próxima semana a Madrid, al estadio Wanda Metropolitano donde se dirimirá el próximo 3 de mayo a las 21.05 horas quién es uno de los dos finalistas de la Liga Europa, una vuelta a la que el Atlético viaja con un 1-1 que le favorece, ya que no solo ganar, sino un empate 0-0 también le lleva a Lyon.
Al buen resultado de la ida se suma que el conjunto rojiblanco solo ha concedido la derrota en dos de los 26 partidos oficiales que ha disputado en su nuevo estadio desde su inauguración el 16 de septiembre de 2017, con 18 victorias, 6 empates y dos derrotas.
Cualquier plan del Arsenal para llegar a la final de la Liga Europa pasa por marcar, algo que solo han conseguido en el Metropolitano el Chelsea inglés, el Barcelona, el Villarreal, el Qarabag de Azerbaiyán, la Real Sociedad, el Sevilla y el Girona.
10. Y DIEGO COSTA
El Atlético tendrá para la vuelta un arma con la que no contó en la ida, la del delantero hispanobrasileño Diego Costa, recién recuperado de una lesión muscular e incluido sorpresivamente en la convocatoria para el partido de ayer sin haber completado un solo entrenamiento con la plantilla, y con el alta médica anunciada apenas una hora antes del inicio del encuentro.
Costa, que vio todo el partido desde el banquillo, pero que no fue incluido en las sustituciones por el segundo técnico rojiblanco, el argentino Germán Burgos, espera estar en plenas facultades para la vuelta de las semifinales, con el objetivo de aportar intimidación a la defensa del Arsenal y goles que les lleven a Lyon.