A Francia le duele Franck Ribery, uno de sus jugadores más importantes. Temido y respetado por los rivales, pese a sus molestias, el jugador del Bayern no se perderá el duelo ante España.
Entre carreras y suave entrenamiento pasó la selección gala el día después de la derrota ante Suecia. Con la reflexión de Laurent Blanc sobre lo ocurrio en el vestuario al finalizar el choque. Quizá las caras en el banquillo hacían presagiar lo q estaba por llegar. El fuego ya se ha extiguido, dijo Boghossian el ayudante del seleccionador. Y es que la tensión tras la derrota ante los suecos puso al rojo vivo el vestuario francés. Reproches y mensajes muy directos entre varios jugadores. Hubo tensión porque habia jugadores que tenían la sensación de que no todos lo habían dado todo en el campo. Pero son cosas que pasan, Todo está aclarado, dijo Blanc.
El lío tras lo de Suecia deja a Francia tocada, con la piel de cordero porque le dan a españa el papel de favorito y con la más que probable idea de que Blanc blinde a su equipo en el medio campo con un trivote. Del Bosque lo descarta.
Sabe el seleccionadopr español que el talento ofensivo de Francia puede decidir cualquier partido. Y en ello trabajará Blanc, que ya ha reconocido que les va a tocar correr mucho detrás de los españoles y también que Croacia les mostró el camino de cómo hacer sufrir a España.
Así llega Francia. Con el vestuario revuelto y con el papel de víctima bien asumido.