El Hospital Universitario de Fuenlabrada ha anunciado que retomará su actividad en consultas externas de forma progresiva a partir del lunes próximo, día 11, con una serie de medidas excepcionales para "proteger a los pacientes, a sus familiares y a todo el personal sanitario".
Para que la circulación de personas sea lo más segura posible, el hospital ha habilitado una serie de circuitos y normativa específica dentro de lo cual "se suspenden las visitas de familiares mientras los pacientes estén ingresados o acudan a las consultas externas programadas", informa el hospital.
Esta restricción de las visitas se extiende a los familiares de los pacientes que sean intervenidos quirúrgicamente, salvo en situaciones de especial vulnerabilidad: pacientes de entre 0 y 16 años o pacientes dependientes con o sin reconocimiento de grado.
También se permitirá acompañamiento a pacientes que "se encuentran en situación clínica grave y cuyo desenlace se prevé en un plazo breve de tiempo" y a pacientes que presentan "una situación valorada y justificada por el equipo asistencial, médicos, enfermería o trabajo social".
En todo caso, los familiares que estén autorizados por el hospital para acompañar y/o visitar a los pacientes "deberán ir identificados con una pegatina de color visible que facilitará el centro", recalcan.
La información a familiares sobre la evolución clínica del paciente se realizará telefónicamente por el médico encargado durante el horario establecido siempre que el paciente haya dado su consentimiento o en aquellos casos que el paciente lo precise.