Es la última imagen que evidencia la presencia del lobo en Madrid. Este ejemplar fue grabado el pasado mes de octubre en la sierra norte y por primera vez se muestra en televisión.
Desde hace una década el lobo ha regresado a Madrid, aunque su población es reducida y vulnerable. No existe un registro oficial, pero se especula con la presencia estable de entre una y tres manadas.
Los ataques al ganado han generado un profundo malestar en el sector. Casi 400 denuncias en 2018 por agresiones a terneros, ovejas o cabras. Los ganaderos denuncian que las ayudas publicas son insuficientes: 450 euros por cada ternero, muy inferior al valor real.
La Comunidad de Madrid ha aumentando este año un 20 por ciento la partida prevista para indemnizaciones, hasta un total de 300.000 euros.
Desde las asociaciones ecologistas, por contra, se asegura que no todos estos ataques proceden del lobo.
Difícil equilibro entre una especie protegida y un sector, el ganadero, que rechaza convertirse en una especie en extinción
