Cada día son más los 'influencers' que están haciendo un oficio de esta forma de publicidad. Se calcula que hay 20 millones de 'influencers' en el mundo y muchos de ellos son un fraude: Llegan a pagar para que les sigan en la red.
Arii, es una influencer estadounidense de 18 años y 2,6 millones de seguidores en Instagram.
Su primera foto la subió en septiembre de 2017 acumulando 139.651 "me gustas".
Tal era su influencia en las redes sociales que un día decidió lanzar su propia línea de ropa, pero no consiguió vender ni 36 camisetas.
Confesó en Instagram su fracaso. Mensaje que tuvo 35.788 'likes', pero curiosamente no consiguió vender sus camisetas.
Los expertos dicen que Internet está repleto de páginas web que permiten comprar seguidores en cualquier red social para engordar tu influencia. Por menos de 10 euros se puede conseguir 10.000 nuevos followers. Por 75 euros, 100.000. Tener 10.000 likes cuesta unos 18 euros y ganar 500 comentarios favorables, menos de 50 euros.
En 2018, las marcas de nuestro país invirtieron 35 millones de euros en campañas con 'influencers', un 400% más que en 2017. La mitad de esa inversión no tuvo ningún retorno aunque las previsiones dicen que el negocio en nuestro país superará los 100 millones este año. La burbuja no deja de crecer.
Los falsos 'influencers' estarían costando a las marcas más de 175 millones de euros.
